Los primeros racimos, ya en los viñedos de Bodegas Arzuaga

El verano ha dejado ya la primavera atrás, los días son más largos y los atardeceres casi interminables. El aire huele a flores y a fruta, adelantando lo que será el próximo mes de julio. Es el momento perfecto para que vengas a Bodegas Arzuaga y te adentres por nuestros viñedos y descubras una parte del ciclo de la vid fundamental: el nacimiento de los primeros racimos. A nosotros es un espectáculo que nos encanta. Porque tienes que disfrutarlo de cerca. Debes acercarte a la vid y retirar las hojas para encontrarlos y poder disfrutarlos. Una experiencia única.

Aún son pequeñas bayas de tempranillo que tienen que desarrollarse. Es lo que llamamos el cuajado, que llega justo después de la floración. Durante unos días hemos disfrutado de un maravilloso olor en todo el viñedo y ahora el cuajado permite que la flor se convierta en fruto y avanza ya que la cosecha va a empezar a desarrollarse. Es un nuevo comienzo para el viñedo y para nuestros vinos. Porque ya podemos ver esos pequeños racimos que albergan uvas minúsculas, casi gotas, que brotan de sus brazos.

La belleza del momento no deja de lado la vigilancia a la que sometemos a nuestros viñedos. Porque es un momento importantísimo para el futuro de los vinos. Hay que prestar atención para detectar cualquier anomalía o problema en el nacimiento de las uvas. Ellas serán las protagonistas de la vendimia y nosotros velamos porque su crecimiento sea perfecto.

Ahora mismo, Bodegas Arzuaga se ha teñido de verde. Un verde brillante en las hojas y un verde pastel en las pequeñas bayas que ya asoman entre la vid. Y por eso te invitamos a que vengas a conocernos en este final del mes de junio. Aquí podrás entender mejor el ciclo de la vid y el momento tan importante que vivimos ahora. Y disfrutar de la belleza de la bodega y del viñedo. La exuberancia que destilan nuestras vides y la vida que ha conquistado la tierra.

Nosotros estaremos encantados de recibirte y de acercarte un poco más a este maravilloso mundo del vino. Así podrás descubrir esos racimos minúsculos en los que ya se intuyen las primeras uvas y compararlos con los futuros racimos, esos que vendrán cargados con las uvas ya maduras, teñidas de ese color rubí que nos encanta. Así que no te lo pienses, ven ya a disfrutar de un día inolvidable en nuestros viñedos.

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