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Hoy en nuestro blog queremos hablaros de un vino muy especial de los que elaboramos con las uvas que recogemos en nuestros viñedos en Castilla-La Mancha. En este caso, además, queremos traeros un vino blanco, monovarietal de chardonnay: Pago Mota. Jesús Bernad, global brand ambassador de Arzuaga, es el encargado de llevar a cabo la cata de este vino que define como “alegre y muy versátil”.
“Pago Mota es un vino blanco de chardonnay y su nombre, Mota, rinde homenaje a un pajarillo que vive en las zarzas y que es muy difícil de ver, hay que ir a descubrirlo”, explica Bernad, que compara esta característica con el vino que protagoniza la cata, ya que, según señala, es “un original blanco por descubrir”.
Si nos fijamos en su elaboración, Bernad destaca que “los viñedos se encuentran a elevada altitud a los pies de la sierra de Malagón, en Ciudad Real, y las uvas doradas se vendimian en su optima madurez en cajas de 15 kilos”. Una vez recogidas las uvas, “se hace un prensado ligero y fermenta el mosto en barricas de roble francés y luego durante 70 días madura en ellas, realizando un suave battonage para ganar volumen de sabor en la boca y para mantener la frescura de la uva”.
Respecto a su cata, en la fase visual vemos “un luminoso color amarillo pajizo, con destellos dorados y verdosos en su ribete que refleja su juventud”. “La nariz es muy limpia e intensa y a la vez seductora, con aroma de flores blancas, recuerdos de frutas tropicales y una pincelada cítrica, que evolucionan a unas gratas notas de tofe, cacao y torrefactos”, explica nuestro global brand ambassador.
Una vez que lo pasamos a boca, su entrada es “untuosa y melosa, con plena frutosidad en equilibrio con su vibrante y refrescante acidez, que le aporta una larga persistencia, con un final avainillado y recuerdos florales”.
Por último, si pensamos en su maridaje ideal, Pago Mota es un vino “a descubrir y disfrutar con platos de cocina vanguardista, como la japonesa o también con marisco, elaboraciones más tradicionales como pescado a la sal o en salsa como un bacalao al pilpil”.
Nosotros estamos convencidos de que Pago Mota es un vino que sorprende muy gratamente a todo aquel que lo prueba, ¡solo queda que lo pongáis a enfriar y lo disfrutéis! ¡Salud!